Piedras Blancas,

Inés MONTES

El PSOE de Castrillón afronta su enésima crisis. El secretario local del partido, Ricardo Ulpiano Álvarez, que fue elegido hace poco más de un año, presentó ayer de forma irrevocable su dimisión. En un escueto comunicado, Álvarez dice que «el motivo fundamental» de su renuncia son las «dificultades surgidas» en la reunión de la comisión ejecutiva celebrada el pasado jueves. Según pudo saber este periódico, en ese encuentro siete de los once integrantes de la comisión presentaron su renuncia por discrepancias con la gestión de Ricardo Ulpiano Álvarez. Ante esa situación, cuestionado por más de la mitad de su ejecutiva, el secretario general se vio obligado a dimitir.

La renuncia fue presentada ayer a primera hora de la mañana ante la Federación Socialista Asturiana (FSA), que deberá ahora tomar las riendas del partido y nombrar una gestora, que se encargará de convocar una asamblea extraordinaria para elegir una nueva dirección local. Para este proceso, establecido en los estatutos del partido, no hay plazos. La dirección regional socialista declinó hacer declaraciones sobre la nueva crisis del partido en Castrillón.

Ulpiano Álvarez negó rotundamente que su renuncia se deba a discrepancias con el pacto de gobierno, suscrito con Izquierda Unida, ni con problemas con el grupo municipal socialista: «Todo lo contrario», se limitó a decir ayer. El hasta ahora secretario local trasladó expresamente al portavoz del grupo municipal del PSOE, Manuel Ángel Galán, que las razones de la dimisión no están vinculadas con ningún problema con su labor en el Ayuntamiento. Álvarez destacó además el grado de cumplimiento que tiene en la actualidad el acuerdo de gobierno con IU.

Lo que finalmente ha hecho tambalearse al secretario general del PSOE castrillonense han sido las luchas intestinas en el partido. La agrupación socialista de Castrillón siempre ha estado sujeta a los vaivenes de la división interna. El desenlace anunciado ayer tuvo su prólogo en la última asamblea del partido, celebrada el pasado 22 de octubre y en la que la dirección local pasó el examen de la militancia por los pelos. A la reunión acudió un tercio de la militancia (38 personas de 114 afiliados). Votaron a favor 20 personas (incluidos los miembros de la ejecutiva local), 15 se abstuvieron y tres no votaron.

En aquella reunión, los militantes pidieron explicaciones a la dirección sobre algunos asuntos. Así, la pérdida de votos en las pasadas elecciones al Parlamento europeo sirvió para recriminar a la ejecutiva la poca presencia pública del partido durante la campaña electoral.

Pero las diferencias en el interior de la ejecutiva han sido palpables en el último año. Medios próximos al partido aseguran que existen hasta tres sensibilidades lo que dificulta la posibilidad de alcanzar acuerdos. Hace un año se prolongaron durante semanas las negociaciones entre las direcciones del PSOE e IU para cerrar el presupuesto municipal de 2009. Fue finalmente el grupo municipal socialista el que tomó la iniciativa y cerró las cuentas. La actuación le costó al concejal de Hacienda y patrimonio, Ramón Martínez Campo, ser el protagonista de una tensa reunión de la dirección local en la que se decidió, según el acta a la que tuvo acceso este periódico, pedirle a Martínez Campo que pusiera su cargo a disposición del partido. Pero ya entonces la decisión no contó con la unanimidad de la ejecutiva.

Ricardo Ulpiano Álvarez sucedió en la secretaria general del PSOE castrillonense al actual portavoz municipal y primer teniente de alcalde, Manuel Ángel Fernández Galán. Álvarez fue elegido en una asamblea celebrada a primero de octubre de 2008 y contó con el apoyo de una amplía mayoría de los militantes.